viernes, 22 de octubre de 2010

Sobre la arrogancia y la humildad

(al principio voy a escribir algo sobre el peligro de la arrogancia y despues pongo como la traccion hacia la arrogancia es casi siempre inherente al desarrollo de la inteligencia. Su relacion con el lenguaje, lo voy a escribir mejor en otro post bien proximo porque este ya se me hizo muy largo.)
Las advertencias mas claras sobre el peligro de la arrogancia están en el evangelio de Lucas, por el capitulo 16.
Esta es una parte de dicho capitulo. La de letra grande correspode a la parabola.


Parábola del administrador injusto.


"Decía también a sus discípulos: "Era un hombre rico que tenía un administrador a quien acusaron ante él de maladministrar su hacienda; le llamó y le dijo: "¿Qué oigo decir de ti? Dame cuenta de tu administración, porque ya no podrás seguir administrando." Se dijo a sí mismo el administrador: "¿Qué haré, pues mi señor me quita la administración? Cavar, no puedo; mendigar, me da vergüenza. Ya sé lo que voy a hacer, para que cuando sea removido de la administración me reciban en sus casas.""Y convocando uno por uno a los deudores de su señor, dijo al primero: "¿Cuánto debes a mi señor?" Respondió: "Cien medidas de aceite." El le dijo: "Toma tu recibo, siéntate en seguida y escribe cincuenta." Después dijo a otro: "Tú, ¿cuánto debes?" Contestó: "Cien cargas de trigo." Dícele: "Toma tu recibo y escribe ochenta." "El señor alabó al administrador injusto porque había actuado con astucia, pues los hijos de este mundo son más astutos con los de su generación que los hijos de la luz.
"Yo os digo: Haceos amigos con el Dinero injusto, para que, cuando llegue a faltar, os reciban en las eternas moradas. El que es fiel en lo mínimo, lo es también en lo mucho; y el que es injusto en lo mínimo, también lo es en lo mucho.Si, pues, no fuisteis fieles en el Dinero injusto, ¿quién os confiará lo verdadero?Y si no fuisteis fieles con lo ajeno, ¿quién os dará lo vuestro? "Ningún criado puede servir a dos señores, porque aborrecerá a uno y amará al otro; o bien se entregará a uno y despreciará al otro. No podéis servir a Dios y al Dinero." Estaban oyendo todas estas cosas los fariseos, que eran amigos del dinero, y se burlaban de él. Y les dijo: "Vosotros sois los que os la dais de justos delante de los hombres, pero Dios conoce vuestros corazones; porque lo que es estimable para los hombres, es abominable ante Dios."La Ley y los profetas llegan hasta Juan; desde ahí comienza a anunciarse la Buena Nueva del Reino de Dios, y todos se esfuerzan con violencia por entrar en él.
"Más fácil es que el cielo y la tierra pasen, que no que caiga un ápice de la Ley".

(LUCAS 16, 1-17)
la parábola de administrador deshonesto o injusto parece que trajo mucha discusión durante la edad media. Es que en verdad es algo chocante, en un primer principio, sino se entiende a lo que Jesús se refiere.
Hoy, creo, es un momento donde es esencial comprender bien esta palabra, a que cosas quiere hacer referencia, que es lo que hace bien el administrador deshonesto y merece reconocimiento por parte de su señor.

Para arrancar voy a aclarar algo que esta en el texto mismo: el señor al que hace alusion el comienzo de la parabola alaba la capacidad de previsión que tiene el administrador, su astucia, alaba que pueda reconocerse, aceptarse como lo que el es: mal administrador (no le discute a su señor sino que presto va a condonar las deudas de los demás deudores), débil (cavar no puedo) y desnudo (con vergüenza para pedir), y obrar consecuentemente con el reconocimiento de esto, saber perdonar los errores “las deudas” de los demás deudores, "mal administradores".

"El señor alabó al administrador injusto porque había actuado con astucia, pues los hijos de este mundo son más astutos con los de su generación que los hijos de la luz. "

Esta parábola habla de la actitud del hombre, del “hijo de este mundo” ante la vida: la administración de bienes; y ante la muerte: cuando el señor nos quita “la administración”, ya no se tiene mas cuerpo.
El hombre a causa del pecado original, introdujo muchas desgracias en su ser, la primer desgracia es que la conciencia del hombre quedo ofuscada, oscurecida, su primer sentimiento es de desnudez frente a la grandeza de la creación pues perdió la conexión de sentido con ella, el hombre quedo como desconectado de la creación. Puede volver a conectarse pero ello implica un esfuerzo grande.
La consecuencia evidente de este ofuscamiento inicial es la razón por la cual el hombre puede interactuar con la realidad de la creación sin tener un conocimiento cabal de cuales serán las consecuencias de dicha interacción. Este interactuar ignorante dentro de la creación es lo que lo conduce a la muerte al hombre y es la razón por la cual para Dios y sus Ángeles el hombre es un mal administrador de la creación que se encuentra bajo su potestad. Por eso mismo dice san Juan varias veces en el Apocalipsis que “el testimonio de Jesús es el espíritu profético”.

Por esto que escribo es que el dinero, para Jesús, como explica en la parábola del administrador sagaz y como dice al final del pasaje, es siempre dinero de la injusticia. ¿Por que es de la injusticia? Porque “el hijo de este mundo” como dice al final siempre es un mal administrador de la creación.
"¿Qué haré, pues mi señor me quita la administración? Cavar, no puedo; mendigar, me da vergüenza.”
El señor no esta alabando los medios con los que se maneja el administrador para lograr su salvación, si en cambio alaba que se de cuenta cual es la posibilidad que tiene el mal administrador, o “el hijo de este mundo” como señala al final.
El señor no critica la supuesta “no habilidad” de los hijos de la luz. Esa no habilidad no existe para la Verdad. El señor solamente esta alabando que los hijos del mundo reconozcan la posibilidad que tienen, o como en las palabras que dije mas arriba, que el mal administrador no confunda nunca su realidad con la Verdad, y la acepte.
Este pasaje también, y sobre todo, da a entender bien del porque "la lucha" de los príncipes, los hijos de la luz, las inteligencias no pueden reconocerse mal administradores, débiles o desnudos por lo tanto no “cambian de posición”, “son menos hábiles en el trato con los de su generación”, no negocian o prevén, por eso parecieran que "luchan" porque no pueden ceder su posición, no pueden ceder su responsabilidad porque “ya saben” que es lo que pasara, saben lo que son, no necesitan mas que reconocer y aceptar el amor con el que Dios va obrando.

Voy a volver al tema de porque se da constantemente la posibilidad de arrogancia en la formación de una inteligencia y del daño que ello ocasiona.

La interacción ignorante del hombre en la realidad tiene un costo altísimo, eso se ve sobre todo hoy. Ejemplos sobran, un caso que asusto a gran parte del siglo xx: la relación entre los descubrimientos matemáticos, los físicos, la bomba atómica y la posibilidad que la vida en este planeta se acabe.
Según san Juan en el Apocalipsis, esta ignorancia que lleva a la ignominia a los propios hombres, es la arrogancia que termina por manifestarse cuando vuelve a surgir “la bestia del mar” (el anticristo), ¿quien como la bestia?, ¿quien puede luchar contra ella? Son los gritos de ofensa y burla a Dios y a todo testimonio sacro que tengamos los hombres que describe Juan en el Apocalipsis.
Y acá se muestra donde vence y confunde la intuición de los hombres la arrogancia de este espíritu de la bestia. El hombre bajo el influjo de este espíritu pragmático ya no se reconoce mal administrador, es mas, no lo puede hacer, el hombre ya no puede optar pues en su código político reconocer se mal administrador no es humildad, es debilidad, y el que se muestra débil es desechado y aplastado por la bestia. La humildad para el nuevo código de la bestia reside en una actitud estoica, en aceptar que “las cosas son así” y no hacer mucho ruido. La inercia social le dice al hombre que tiene que ser, o por lo menos mostrarse, “capaz”, “útil”, “idóneo” y miles de otros títulos mas que van en contradicción directa con el poder darse un lugar interior para reconocerse mal administrador.
En este tipo de funcionamiento el hombre se vuelve cada vez mas ciego de si mismo.
Esto pasa hoy día, y va a pasar cada vez mas si no nos ocupamos de poder diferenciar y denunciar ese espíritu que destruye y corrompe, va corrompiendo, llenando de confusión y perdiendo, a lo largo de la historia, las almas de los hombres.
Hoy gracias a las finanzas el hombre puede planificar su economía. Países pueden generar guerras para que su economía se mantenga confiable gracias a conseguir un lugar donde sus empresas puedan invertir. Gracias a esta posibilidad, que ofrece la tecnología de guerra, un gobierno puede generar “profecías auto-cumplidas”, es decir, puede mostrar que dentro de 20 años va a seguir siendo confiable –económicamente- porque teniendo el poder económico, bélico y con una hábil política nada se le puede oponer, pues los demás conociendo su poderío, lejos de oponérsele, trataran siempre de sacar la mejor tajada, siempre “políticamente hablando”. No importan ya las personas particulares, importa si que la persona particular ponga a servicio de este movimiento político-financiero toda su capacidad para que este movimiento continué lo mas “armoniosamente” posible. En pocas palabras, la personalidad de un hombre o la posibilidad de existencia de una persona va a depender de que esta persona se venda y se arrodille “estoicamente” lo más posible ante este movimiento político y financiero. La persona va a ser considerada tanto persona de acuerdo a su “utilidad” para el sistema que ya se retroalimenta solo.
Este espíritu de retroalimentación inmanente que no respeta al hombre particular, en tanto persona única, y lo obliga a seguirlo y luego de usarlo lo desecha, es el espíritu de la bestia del mar, que no esta en armonía ni con la tierra, corrompiéndola sin conocer que será lo que ocasiona la interacción de la tecnología, ni en armonía con los hombres, que los esclaviza a adorarlo casi sin siquiera tener una opción consciente.
Por eso, para nuestra identidad sentir y saber, no podemos escapar de la Verdad y de la Ley de Dios, nos tenemos que esforzar por reconocerlas, ya que estas, de ultima, son las que nos dan la razón, razón de Ser, saber que Somos, que somos algo aunque no sepamos que. Y somos los únicos seres materiales en la tierra que podemos saber esto, repito, aunque no sepamos muy bien que significa esto de Ser.
La humildad, la verdadera humildad nos lleva a reconocer esa ley y esa verdad sobre nosotros, y esa actitud es la que lucha contra esa autosuficiencia de la inteligencia inicua de la bestia que reniega, ignorantemente, de siglos de sacrificios de los santos y de los mártires que posibilitaron la libertad en la que vivimos en occidente. El anticristo o “la bestia del mar” es la tergiversación del espíritu de Cristo a favor de uno mismo, de manera egoísta. Es “anticristo” porque de manera disimulada y escondida, con engaños va absorbiendo el poder moral, “chupa la sangre”, en vez de darla como Cristo.
San Juan dice que cristiano “el que confiesa a Jesucristo manifestado en la carne” y anticristo el que no lo hace.
Pero que significa esto de “el que confiesa a Jesucristo manifestado en la carne”? el que confiesa de esta manera a su Dios es la persona misericordiosa que puede ver en cada persona, en el sufrimiento de cada persona, la posibilidad de devolver el amor que Jesús nos dio y nos da, nos da la oportunidad de ser una canal por El, en el nombre de El, y para El, por los siglos de los siglos, que camina hacia la eternidad.
Y por eso mantener el nombre verdadero y la enseñanza verdadera tiene mucha importancia. Jesús fue una persona particular, se hizo hombre, camino igual que nosotros sobre la tierra, nos amo, nos vino a salvar. Esto es así.
Luchar contra las palabras y contra enseñanzas falsas en un mundo materialista parece no tener valor. Pero mantener la verdadera enseñanza del nombre del espíritu es lo que nos hace estar fuertes con nuestra conciencia, más unidos y fuertes, como personas, frente a enseñanzas que destruyen las relaciones entre los hombres y esclavizaban a los hombres a los poderes materiales, los baales, la bestia, que los hacen caer en vanidades que de a poco van corrompiendo y vendiendo el alma.



Hasta acá lo que había escrito sobre esa parábola y la importancia del ser humilde, la importancia del poder reconocerse.
El administrador sagaz es una inteligencia en formación, un administrador, por ello “cavar no puede y pedir le da vergüenza”, pero si puede reconocerse como alguien en formación, "mal administrador", y en esto reside la actitud humilde.
La formación estructural donde se mueve toda inteligencia genera una respuesta, una reacción consciente, una postura; en palabras sintéticas una decisión o elección interior, siempre interior, libre. Para dar como ejemplo bien conciso y de primera mano, sobre este peligro de la arrogancia y como se esconde en pliegues de nuestra conciencia e inteligencia, voy a poner a este mismo escrito que acabo de postear.
Como dije en el parrafo de arriba y si se entendió la parabola, y si se esta algo de acuerdo con ella, pueden surgir dos reacciones como respuesta a esta, se puede elegir dos posturas formativas ante un estimulo inteligente. paso a explicarme
Se produce un estimulo inteligente: alguien me cuenta una historia, me enseñan una teoría, leo un libro, aprendo a hacer algún deporte o cualquier actividad que involucre mi intelecto.


Si se esta algo de acuerdo con el estimulo inteligente -es decir: se le presta atención- entonces surgen dos reacciones como respuesta a este, se pueden elegir dos posturas formativas. La formación estructural donde se mueve toda inteligencia, la memoria, genera dos posibles respuestas ante el estimulo inteligente, una reacción consciente con dos caras posibles, podemos elegir y hacer real una postura de dos posibles; en palabras sintéticas la respuesta consiste en una decisión o elección interior, siempre interior, libre, que nos conduce a mas libertad o a la no-libertad.

La reacción que conduce a mas libertad, la mas profunda y la que reconoce implícitamente que existe algo mas allá de lo material y algo mas fuerte que lo material (tanto mas fuerte que hasta lo termina determinando), consiste en profundizar dentro nuestro a partir del entendimiento del estimulo y, a partir de dicha profundización, ser mas conscientes de nuestras posibilidades y limitaciones y actuar consecuentemente con ello, es decir, ser mas humildes.

Pero existe otra reacción. Es una reacción más externa, estéta, “cáscara”, la cual a su vez puede generar una cadena de “cascaras”, cascadas al infinito, como un abismo. Esta reacción silenciosa pero siempre presente como posibilidad debido a la estructura de nuestra memoria no consciente (¿inconsciente?) consiste en que después de la reacción autentica de descubrimiento y recogimiento interior, en lugar de seguir profundizando en este sentimiento donde verdaderamente estamos y “somos” nosotros, reencontrandonos con nuestros limites espirituales, en lugar de hacer esto al revés nos alejamos, nos miramos desde lejos como desde un espejo (como narciso), especulamos, comenzamos a auto-contemplarnos no como ser vivo sino como una cosa a la que hay que adornar, nos cosificamos controlandonos sin limitaciones a nosotros mismos pero, así también, nos dejamos sin posibilidades de otra manera de vernos, de otro punto de vista sobre nosotros.

En esta reacción en lugar de aprender como ser mejores para sentirnos mejor nos olvidamos de esto porque sentimos que esto nos compromete, y enseguida preferimos vernos de lejos, bajo control, des-comprometidamente, como si ya fuéramos así, según una sola mirada, según lo que el sistema dice es lo que somos, desde afuera. Eso si: como tenemos esta aparente sensación de control, nos suponemos sin limites, y para aumentar esta sensación nos sentimos obligados –y así perdemos la libertad- a tener que aprender para “ser” mas, para "ser mas” inteligentes o vivos, mas actualizados, mas informados porque así podemos, decimos, actuamos y/o nos imponemos; pero lo malo es que nosotros no somos los que hacemos eso porque "el sistema" de la memoria, de información externa, hace rato que ya se nos impuso a nosotros, y nosotros lo que hacemos es simplemente seguirle la corriente.

Ahora quizás ya se entiende porque digo que esta reacción externa puede extenderse al infinito, como un abismo. Porque sobre esto que dije en estos tres últimos párrafos podemos tomar de nuevo una de esas dos reacciones y, si elegimos la externa, podemos continuar haciéndonos este autoengaño al infinito, siempre creyéndonos más y olvidándonos de lo que significa ser mejores. Si sigo creyendo que con solo estar advertido por una formula de la inteligencia no voy a especular perdiéndome de nuevo, sigo preso de la actitud de “yo soy mas” porque “ya se” de esto, y, al creer ya saber de esto podemos caer otra vez y así seguir para siempre. No es una cuestión de “soy mas” (que antes, que el, que todos) sino de soy mejor porque me siento mejor y eso depende de mi y no de cómo vea-vean desde afuera, no es una cuestión de cantidad cosas para verme mejor sino es poder dar un salto de calidad hacía mi.

Por eso el ser mejor, el sentirnos mejor, no depende de una formula externa y la reacción interna frente a lo que aprendemos da cuenta de una realidad mucho más potente que la material que conocemos. Porque la verdadera existencia nace de nuevo y constantemente desde el interior, de adentro, lo de adentro es lo único que se sabe en contacto con algo, un Espíritu mejor de lo que uno es, y que nos puede renovar constantemente.

2 comentarios:

  1. esta bueno, lo tengo que desmenuzar mas tranquilo despues. Estoy de acuerdo en la tesis de que la arrogancia en general no es una buena actitud. A veces (o siempre) es necesario tener "autoestima" o una confianza de lo que se hace, pero yo a la arrogancia la entiendo como una actitud que excede la confianza. Es como un paso mas adelante de la confianza en las propias potencialidades. Yo aspiro a tener mas confianza, pero veo que la arrogancia es en realidad quizas una falta de confianza. O sea que se quiere demostrar mas de lo que se es para ocultar las flaquezas que en el fondo todos tenemos. Bue, te mando un abrazo y la seguimos!

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  2. Si es eso que decís, la arrogancia se da cuando hay una falta de confianza, de fe en el poder de uno, y se busca estar seguro por otros métodos.
    Lo que quise expresar con eso escrito es que quizás la cultura que producimos los hombres de hoy -hablando en gral- genera una especie de arrogancia sistémica y por ello casi imperceptible. Es una arrogancia del hombre para con la creación y también para con nosotros mismos porque nuestras inteligencias se forman paradas sobre ciertos supuestos que son muy débiles, aunque nosotros los queramos pensar y hagamos un hecho incuestionable. Para dar un ejemplo de un hecho de estos, quizas el mas importante, es el de Nietzsche cuando habla de la muerte de Dios. El no habla de esto metafísicamente, no se pone a discutir la existencia de Dios, sino que habla de hecho y lo que esta diciendo es que el poder de la época y la sociedad -aunque nominalmente Dios siga existiendo entre los hombres- ya trabaja fuera de los parámetros de la fe, por ello para la sociedad es un hecho que “Dios ha muerto” aunque todavía no lo sepa. Yo creo que es cierto en parte lo que nietzsche nos dice, y es mas cierto todavía hoy, y considero también que ese es uno de los supuestos débiles donde se forma la inteligencia y consciencia de muchos hombres de hoy, porque por mas que para el código o la realidad social en que vivimos hoy Dios nos parezca poco importante, ello no significa que en verdad lo sea, o lo vaya ser.

    Un abrazo y la seguimos sí!

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